Sixth Grade Superheroes
By John P. Romero
El Quincenal de las Californias.- I have a strange adventure story to tell you about two underdog students who became twelve-year-old superheroes. Let us hop on board our powerful Mental Transporter and venture into the past.
It was my first day as a sixth grader. I was the first to walk into my classroom. I was surprised to see a casually-dressed man who did not look like a teacher. He was not wearing a sports jacket or tie. He looked unprofessional. He introduced himself as Mr. Backslide. In that instant, I felt eerily uncomfortable around him. I had never felt this feeling before. He seemed like a sinister character in a spooky movie.
I took my seat in the back of the room to study the teacher’s actions and habits. A week later, the teacher was gesturing inappropriately in front of the girls. He would find excuses to punish the boys. He would put the boys in a corner holding a bat, arms extended.
Unexpectedly, Mr. Backslide left for two weeks, and a substitute teacher took his place. He introduced himself as Mr. Masters. He looked very professional and wore a sports jacket and tie. It was as if a dark, lingering cloud had vanished. We felt comfortable around the substitute teacher. He sounded as if he was in the military. We learned respect and discipline. We liked him very much, especially the girls who thought he was very handsome.
One morning, Mr. Masters asked me if I wanted the task as flag monitor. I said, “Yes sir!” He also asked me if I wanted to participate with the junior safety patrol. I said, “Yes sir!” He saw that I showed leadership and responsibility. I learned these from my space hero Flash Gordon and The Mental Transporter.
Two weeks later, Mr. Backslide, the Dark Cloud, returned. The sixth grade students noticed the difference between a good teacher and bad. The next day, Mr. Backslide let all the girls go to recess. He told us boys to stay behind and stood us around his desk. He opened his desk drawer and showed us a magazine filled with pictures of nude girls. I was shocked, but I never told my parents of what had happened in Mr. Backslide’s classroom.
The next day during recess, all the students ran up to me and said that they wanted Mr. Masters to return as our teacher. I thought about it for a second and said, “I will go back and show Mr. Backslide’s nude magazine to the Principal.” A friend named Diana volunteered to go with me. I said okay. The next morning, Mr. Masters walked in our classroom and all the students cheered. Just like superheroes without fanfare, Diana and I smiled at each other as if to say, “Mission Accomplished!”
Sexto grado los superhéroes
Por John P. Romero
EL QUINCENAL DE LAS CALIFORNIAS.- Tengo una extraña historia de aventuras para contarte sobre dos desamparados a los estudiantes que se convirtió en doce años de edad, de superhéroes. Déjanos hop a bordo de nuestro poderoso transportador mental y aventurarse en el pasado.
Fue mi primer día como una niña de sexto. Yo fui el primero en entrar a mi clase. Me sorprendió ver a un hombre vestido de manera informal que no pareces un maestro. No estaba usando una chaqueta ni corbata. Se veía poco profesional. Se presentó como el Sr. Reincidir. En ese instante, me sentí muy incómodo con él. Nunca me había sentido este sentimiento antes. Parecía un siniestro personaje en una película de terror.
Me senté en la parte de atrás de la sala para el estudio de la maestra de acciones y hábitos. Una semana más tarde, el profesor estaba gesticulando de forma inapropiada en frente de las chicas. Él podría encontrar excusas para castigar a los chicos. Iba a poner a los chicos en una esquina con un bate, brazos extendidos.
Inesperadamente, Sr. reincidir izquierda durante dos semanas, y una maestra sustituta tomó su lugar. Se presentó como el Sr. Masters. Se veía muy profesional y llevaba una chaqueta y corbata. Era como si una nube oscura, había desaparecido. Nos sentimos a gusto con el profesor suplente. Sonaba como si estuviera en el ejército. Aprendimos el respeto y la disciplina. Nos gustó mucho, especialmente a las chicas que pensaba que era muy guapo.
Una mañana, el Sr. Masters me preguntó si yo quería la tarea como bandera monitor. Yo dije, ” sí señor!” También me preguntó si quería participar con el junior de la patrulla de seguridad. Yo dije, ” sí señor!” Vio que me mostró el liderazgo y la responsabilidad. Yo aprendí esto desde mi espacio héroe flash gordon y el transportador mental.
Dos semanas más tarde, el Sr. Reincidir, la nube oscura, he regresado. El sexto grado los alumnos notó la diferencia entre un buen maestro y en las malas. Al día siguiente, el Sr. Reincidir deja que todas las chicas van al recreo. Nos dijo que los chicos de quedarse atrás y se quedó con nosotros su escritorio. Abrió el cajón de su escritorio y nos mostró una revista llena de fotos de chicas desnudas. Me sorprendió, pero nunca se lo dije a mis padres de lo que había pasado en el aula de reincidir.
Al día siguiente durante el recreo, todos los estudiantes corrió hacia mí y me dijo que quería el Sr. Amos a regresar como nuestro maestro. Lo pensé por un segundo y dijo, ” voy a volver y acompañar al Sr. Reincidir es la revista de desnudos a la directora.” Una amiga llamada Diana se ofreció a ir conmigo. He dicho que vale. A la mañana siguiente, el Sr. Amos caminado en nuestro salón de clases y todos los estudiantes aplaudieron. Como superhéroes sin fanfarria, Diana y me sonrieron el uno al otro como si dijera: ” misión cumplida!”
